Estudios de Cine Arruga
Estudios de Cine Arruga
El proyecto nace de la decisión de ubicar los estudios de cine ARRUGA en un polígono industrial de la periferia de Barcelona al considerar la producción de películas y spots publicitarios como una actividad industrial.
Así un edificio destinado a albergar una actividad creativa debería convivir en un mundo gris y mudo - sin lenguaje - fábricas y almacenes con actividades horarias típicas de los polígonos industriales.
Ante la imposibilidad de generar un diálogo con sus vecinos, el edificio se convierte en la imagen y el reflejo de su propia esencia, mostrándose así de la única forma posible : un edificio para hacer películas.
Su fachada principal se convierte al oscurecer, en un trozo de celuloide convirtiendo en cine la propia actividad del edificio : producción, post-producción, realización.. permaneciendo el resto del programa oculto tras la caja ciega : casting,vestuario, attretzo, almacenes, montajes, talleres, camerinos y servicios, y finalmente el gran espacio destinado al plató cinematográfico que se nos presenta en su forma más neutra.
La construcción, materiales, estructura e instalaciones de este espacio se ponen al servicio de la actividad principal reforzando la neutralidad del proyecto.
El edificio se construye con técnica y precio de nave industrial : estructura de acero vista con protección contra-incendios, forjados deck colaborantes, muros de bloque de hormigón, suelos de hormigón pulido, instalaciones vistas, fachada de tableros de cemento-madera. El proyecto incorpora, como elemento externo, una plantación lineal de populus teixana a poca distancia de la fachada principal.
Esta formación vegetal nos revela un nuevo espacio intersticial negativo del interior. Este espacio relaciona la actividad interna con el espacio exterior, al tiempo que utiliza su condición cambiante . En verano un espeso colchón verde protege del sol, en otoño cambia de color y purga sus hojas, en invierno se convierte en un reflejo sobre la gran ventana acristalada y en primavera va mostrando sus diferentes coloridos.
Entre esta pantalla de árboles y la calle del polígono, un espacio abierto destinado a la llegada y circulación de vehículos.
Al final en un polígono industrial, una caja gris plantea una cuestión de arquitectura : la tensión entre la envolvente y el espacio interno articulado por la luz.